Heme aquí otra vez, intentando de todas las formas posibles de deshacerme de éste pesado ropaje que no me deja respirar. Quisiera de cualquier modo no ser de ésta forma; prometer a cuanto ser se me cruce ser mejor, evolucionar, ser mas civilizada, pero es tan difícil...
Cómo aceptar la idea de una pertenencia exclusiva? Toda tuya o todo tuyo y solo tuya parece una idea tan simple... pero no lo es.
Mi alma es un alma vagabunda que necesita del arrobamiento de las palabras sensuales que te descienden a los infiernos y te queman en la pasión.
Cómo evitar el deseo de sentir que unas caricias furtivas me quemen la piel?
Cómo dejar de necesitar esas palabras lascivas que me hacen sentir la peor?
Será acaso que nunca podré calmar el súcubo que habita en mi?
Será que Lilith se apoderó definitivamente de mi carne?
Amada fidelidad, te ofrendo mi cuerpo pero nunca mi alma...